INGREDIENTES:
300gr harina común
200gr harina de fuerza
2 cucharaditas de sal
2 cucharaditas de azúcar
310ml de agua templada
50gr de levadura fresca
PREPARACIÓN:
De los 310ml de agua templada apartamos un poco en una tacita, deshacemos la levadura y le añadimos las dos cucharadas de azúcar, dejándola unos 15 minutos hasta que le salga una espuma por encima.
Mezclamos las dos harinas con las dos cucharaditas de sal, hacemos un hueco en medio y le añadimos la levadura y el resto de agua, mezclamos bien hasta que quede una masa elástica y maleable que no se pegue en los dedos, es entonces cuando lo dejaremos en un lugar cálido unas dos horas hasta que doble su volumen, tapada con un trapo húmedo.
Transcurridas las dos horas volvemos a amasar y partimos 2 o tres trozos iguales, dependiendo de lo gorda que la queráis y de cuanto os haya hinchado.
Engrasamos 2 moldes con aceite de oliva virgen extra, como veis en la foto, yo he utilizado 2 moldes de aluminio, pero cualquier otro molde está bien.
Depositamos los las porciones de masa cada una en su molde, las volvemos a tapar y las dejaremos levar de nuevo durante una hora.
Pasado ese tiempo echaremos un chorrito más de aceite de oliva por encima y extenderemos la masa con los dedos con cuidado y volveremos a dejar levar durante una media horita.
Ahora es el momento de hacer la focaccia a nuestro gusto, se puede hacer de lo que te guste, yo hice una de cebolla con albahaca y perejil, y a la otra le puse cebolla, pimiento, bacon suave y un poquito de tomate.
Eso ya va a gustos.
En esta receta y para esta masa es importantísimo respetar los tiempos de reposo para que la masa quede esponjosa e hinche de la forma correcta.
Espero que os haya gustado, esta vez no he podido hacer muchas fotos, pero cuando vuelva a hacer la receta incluiré más fotos.
Espero que la hagáis por que merece la pena!!
Hasta la próxima.
Raquel
